Tägliche Andachten
Llamado a la intercesión
¿Sabe de qué estaba hablando Jesús cuando dijo esas palabras? Estaba refiriéndose al llanto del intercesor y al consuelo que este recibe cuando el Espíritu Santo le asegura que su oración ha sido oída.
Orar hasta ser oído significa “romper las barreras que han detenido la obra de Dios en la vida de otros”. Significa usar su armadura espiritual para repeler las fuerzas de las tinieblas que los rodean.
Hoy en dia se necesitan con urgencia creyentes que estén dispuestos a orar de esa manera. Se necesitan intercesores que vayan delante de Dios y alcancen misericordia y compasión para los pecadores, los enfermos y los abatidos. Se necesitan guerreros de oración que estén firmes hasta que tengan la seguridad en su espíritu de que toda barrera ha sido derribada y toda atadura ha sido desecha.
Dios está buscando esa clase de intercesores, porque hay ciertas cosas que no acontecerán en este mundo sino hasta que los halle. Hay bendiciones y manifestaciones de Dios que solo vendrán cuando alguien las haga realidad por medio de la oración.
El mismo Jesucristo vino a este mundo como resultado de la intercesión. ¿Se acuerda de Simeón y Ana? Ambos eran intercesores y guerreros de oración. Habían pasado años en llanto espiritual, orando para que el Mesías viniera. Cuando por fin se hizo realidad, fueron consolados por el Espíritu Santo. Al ver ellos al recién nacido Jesús en el templo, lo reconocieron y se regocijaron.
Si usted se pregunta si es uno de los que han sido llamados a la intercesión, entonces probablemente lo sea. Dios está llamando creyentes de todas partes para que experimenten ese llanto y consuelo especiales que solo los intercesores pueden conocer. El está llamándolo para que dé su vida por otros en la oración.
En algún lugar del mundo, alguien necesita que usted ore por él o ella hasta que sea oído. Tómese un buen rato para estar de rodillas hoy.
Heiligschriftstudium: Lucas 2:1-38